NUEVA TEMPORADA EN CHASQUIDOS. ANSELMO COBIRAN HA REANUDADO LAS PUBLICACIONES TRAS SU DESCANSO DE VERANO

lunes, octubre 16, 2006

Manifiesto personal sobre la Asociación de Prensa de Cuenca

En Cuenca la asociación de prensa estaba muerta, llevaba mucho tiempo sin funcionar, pero ahora la nueva generación de periodistas que trabaja en esta ciudad quiere recuperarla y se organiza para conseguirlo. Mañana se celebrarán elecciones. Bueno, digo elecciones, aunque quizás no sea la palabra más precisa. Elegir, elegir, lo que se dice elegir, pues no se elige nada, porque sólo se ha presentado una candidatura, encabezada por un compañero de la Cadena Ser.
Mi pensamiento es claro. Siempre es mejor estar juntos que separados. Antes bien avenidos que enfrentados. Por eso me agrada que resucite esta asociación. Sin embargo, no quiero caer en la ingeniudad y preveo obstáculos con los que se va a encontrar.
Sé que será impopular esta observación, pero echo en falta más periodistas de Cuenca en la única candidatura. En su lista figuran compañeros en su mayoría de Madrid y también otros de Malaga y el País Vasco. No me muerdo la lengua y digo esto de la misma forma que cuestionaría una asociación integrada en su totalidad por conquenses porque eso no sería representativo. En esta ciudad trabajan profesionales venidos de otras provincias que enriquecen el panorama de los medios, tanto en lo profesional como en lo humano. Una mayor presencia de conquenses sería beneficiosa y ayudaría a darle continuidad a la asociación. El mundo da muchas vueltas y cualquier día un periodista puede ser trasladado a otro destino, pero si es de Cuenca ese vínculo que tiene con esta localidad, al estar arraigado en ella por nacimiento, no lo perderá nunca mientras que, seamos sinceros, si uno de fuera se marcha, por muy integrado que estuviera aquí, ya no tendrá una atadura tan fuerte que le anime a mantener la asociación.
Me parece inteligente que la única candidatura haya presentado un programa realista con unas metas que, sin ser fáciles todas ellas, se pueden alcanzar en la medida de lo posible. Conseguir acreditaciones para aparcar, un local para las reuniones, organizar cursos formativos o mantener una ronda de contactos con instituciones para que se sensibilicen y respeten la labor del periodista son aspiraciones sensatas y factibles. No obstante, creo que al menos al principio la consecución de un local debería ser un asunto secundario, a no ser que se encuentre a un coste asequible o gratuito, puesto que los medios económicos con los que contará esta asociación, a razón de cinco euros al mes de cuota por socio, serán escasos y no permitirán en modo alguno tirar la casa por la ventana.
Lástima. Los integrantes de la única candidatura que se somete a votación mañana han cometido un error que no pasaré por alto. Se han equivocado al no ofrecer un puesto en su lista a una compañera que se ha implicado con entusiasmo para que la asociación salga adelante. Diría incluso que me parece descortés e ingrato que no hayan tenido el obvio detalle de invitarla a sumarse a su candidatura. Aplaudo la iniciativa que han demostrado los miembros de la candidatura al presentarse, pero me sorprende que no hayan caído en la cuenta de que una de las personas que más se ha volcado en esta asociación, y que más esperanzas deposita en ella, no estará en la Directiva.
Para que una asociación perdure es indispensable que sus componentes compartan intereses. Y para ser franco, con el corazón en la mano, pienso que los periodistas de los medios de comunicación no están en el mismo bando que los gabinetes de prensa, en especial aquellos de carácter público, precisamente porque sus intereses son distintos. Si se mezclan ambos en la asociación sin duda que habrá que renunciar a ciertos objetivos que puedan enfrentar a unos con otros, con la perdida de ambición que eso conlleva. Cuánto más amplia y diversa sea la asociación menos específicos habrán de ser sus objetivos para contentar a todos sus miembros.

"Frente a quienes practican la intolerancia, desprecian la convivencia, no respetan las instituciones ni las normas elementales de una ordenada libertad de expresión", Anselmo Cobirán advierte de que en este blog no se consentirán comentarios de carácter ofensivo.