NUEVA TEMPORADA EN CHASQUIDOS. ANSELMO COBIRAN HA REANUDADO LAS PUBLICACIONES TRAS SU DESCANSO DE VERANO

jueves, febrero 23, 2006

Secuencias

- Serafín es un periquito azulado que no sabe volar.

- Rosario es una soltera depresiva que cumple cuarenta años el próximo 29 de febrero.

- Bimbo es un barrendero cojo. El 29 de febrero tiene cita con el médico.

- Ana de Jesús es una toxicómana adicta a la heroína.

- Un Policía Nacional corrupto.

- Un Policía Nacional de servicios internos.

- La calle Afiladores está a las afueras de la ciudad. El alumbrado público falla y los apagones son frecuentes. En un callejón se refugia Ana de Jesús para inyectarse las dosis.

- Falta un camello.

- Ana de Jesús nunca lleva dinero encima. El que llega a sus manos se lo gasta de inmediato en dosis, una barra de pan y agua mineral Font Bella. Compra Font Bella porque el nombre le gusta y piensa que así se cuida y estilizará su cuerpo.

- El callejón es muy oscuro, incluso de día. De noche, si no hay apagón, queda en penumbra.

- Pues eso, que Ana de Jesús esta drogándose a oscuras en este callejón cuando de repente le alumbran con una linterna. Le enfoca el Policía Nacional Corrupto, que es el camello. Este policía compra la droga a un marroquí que frecuenta los calabozos de la comisaría. Le hace descuento a cambio de hacer la vista gorda, pero aún así lo detienen a menudo porque es indiscreto. Después se la vende a Ana de Jesús al triple de precio.

- Ana de Jesús está en paro. Antes trabajaba de barrendera y fue novia de bimbo, el barrendero cojo, que la abandonó por su adicción, pero sigue queriéndola.

- La intimidante luz de la linterna deslumbra a Ana de Jesús. No ve nada, pero ya sabe que le apunta el Policía Corrupto. No le ha pagado su última dosis y está enfadado. El Policía corrupto es muy violento. Todos los días se ejercita en un gimnasio y toma anabolizantes. También se dopa con una extraña sustancia que masca, parecida a un chicle, pero sabe a rayos. Sus brazos son musculosos.

- Rosario enseña a su periquito a hablar. El verterinario le ha dicho que los periquitos no son tan listos como los loros pero sí pueden aprender algunas palabras fáciles de pocas sílabas. Rosario le repite cada dos por tres la palabra 'Rata'. Le hace gracia que un periquito diga rata. Es una chorrada. Al narrador de Chasquidos no le hace gracia, pero sigue esta historia separada por guiones.

- El periquito es sordo, pero Rosario no se ha dado cuenta. El veterinario tampoco. La falta de oido le hace perder equilibrio y a veces el pobre pájaro cae fulminado del palo al que se agarra.

- El Policía corrupto se acerca a Ana de Jesús.

- Serafín intenta escaparse por un hueco entre dos barrotes. Mete su cabeza con todas sus fuerzas, sin éxito. Rosario raciona su alpiste y tiene hambre.

- Ana de Jesús, atemorizada, se acurruca en la esquina del callejón.

- Rosario está triste porque intuye que el día de su cumpleaños hará balance de su vida. Los cuarenta es la edad para hacer balance. Los cuarenta son una cima desde la que se puede divisar tu futuro y tu pasado y a ella le falta poco tiempo para encumbrarla.

- El Policía corrupto saca su porra reglamentaria. Ana de Jesús está indefensa. Antes llevaba una navaja, pero se la vendió al policía a cambio de una dosis extra. Era una navaja suiza, pero suiza de verdad, o sea, de Suiza, del país aquel de los bancos y cuentas secretas en el que hacen relojes de cuco.

- El Policía corrupto blande su porra y se apresta a atizar a la pobre Ana de Jesús pero cuando está a punto de descargarle un golpe brutal entonces siente pena y vuelve a envainarla. El marroquí le ofreció una porra eléctrica, pero a un precio muy alto.

- Ana de Jesús ha perdido el conocimiento. Cree que el Policía la va a matar. El Policía corrupto es corrupto, pero no sería capaz de matar a nadie. Es un matón que no mata.

- El Policía Corrupto lleva quince años en el cuerpo. En una ocasión le condecoraron por encerrar al marroquí. Los servicios internos le investigan al tener conocimiento de que extorsiona a los toxicomanos.

"Frente a quienes practican la intolerancia, desprecian la convivencia, no respetan las instituciones ni las normas elementales de una ordenada libertad de expresión", Anselmo Cobirán advierte de que en este blog no se consentirán comentarios de carácter ofensivo.